La atención postmortem es el conjunto de intervenciones de enfermería que se proporcionan al cadáver y a sus familiares.
El duelo es una reacción del sujeto ante la pérdida de algo significativo (libertad, ideal, amor, prójimo, familiar). Este es un proceso lento y doloroso con desviación de la conducta por falta de interés hacia el mundo externo o incapacidad de elegir un nuevo objeto amoroso.
Las etapas del duelo son de negación, de concientización de la perdida que se acompaña en la mayoría de las veces de llanto e ira en contra del individuo o circunstancias responsables de la muerte; de idealización, reprimiendo sentimientos hostiles y negativos hacia la persona muerta.
Las etapas del duelo varía en cada persona dado que dependen del carácter, tipo de relaciones personales, cercanía con la familia, experiencias infantiles, sucesos diversos, tipo de muerte.
En toda sociedad o cultura existen costumbres, creencias y practicas rituales que gobiernan las actividades y el comportamiento familiar, entorno a la enfermedad o muerte.
El conocimiento sobre el proceso cognoscitivo, formación de aptitudes, opiniones, normas y creencias, ayuda en la planeación de la atención de enfermería y aumenta la sensación de bienestar y seguridad.
La intimidad es una estructura existencial de la persona.
Todo material que ha estado en contacto con el paciente debe considerarse como potencialmente infeccios. La sistematización de las intervenciones de enfermería permite la realización de un trabajo limpio y ordenado.
La rigidez cadavérica se lleva a cabo por la coagulación del plasma de los músculos y del glucógeno, así como la formación del ácido sarcoláctico.
Se presenta progresivamente en músculos de la nuca, maseteros, cara, cuello, extremidades y el resto del cuerpo de manera progresiva.
Una posición de decúbito dorsal y ligera elevación de la cabecera, evita deformidad en la alineación corporal e hipostasis cadavérica.
La obstrucción de cavidades corporales y heridas con material de algodón, tiende a absorber líquidos y secreciones y evita su salida. La compresión ejercida sobre el abdomen tiende a eliminar líquidos y gases contenidos en el estómago, intestinos y vejiga.
Una apariencia exterior del cadáver conlleva a una satisfacción emocional de los familiares con respecto a la imagen de su ser querido.
El aseo esmerado del cadáver permite presentar a los familiares una apariencia apacible y pulcra de su ser querido.
La identificación correcta en cuanto a nombre del cadáver, número de cama, servicio, fecha y hora del deceso y nombre del médico tratante, evita errores en la entrega de éste.
La sistematización de pasos con base en el conocimiento científico, actitudes y capacidades ayuda a la realización de todo procedimiento con un mínimo de errores.
La posesión de pertenencias del ser querido fallecido representa bienestar, seguridad y satisfacción en los familiares.
El certificado de defunción es un documento legal para fines sanitarios, legalización de bienes o beneficios familiares. Es una constancia de muerte expedida por el médico tratante.
El consentimiento bajo información en relación a donación post mortem de órganos y tejidos o autopsia, requiere de un documento otorgado por el disponente originario (paciente) seguido ante autoridades jurídicas.